Coge sus amaneceres por el mango de la risa floja, su religión solo apuesta a blanco o negro por todos sus sueños y además, le pica por todas partes la curiosidad de pegar bocao' a esta vida rebosante de ganas. Por todo lo demás; solo algunos días desea ser canción instrumental. Sin espacio para las palabras. Solo ruido. Mucho, mucho, mucho ruido.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario